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domingo, 20 de mayo de 2012

PRESIONES

Llevo mucho tiempo sin escribir, problemas personales me lo han impedido, que desde luego cosas no han dejado de pasar en mi empresa.
De hecho mi empresa se ha convertido en una fuente incesante de cotilleos y rumores y esta situación ha empezado a sacar lo peor de mucha gente. En mi departamento cogieron a dos personas robando y los pusieron en la puerta de la calle. Lo más lamentable es que los dos eran enlaces sindicales y que implicaron a otras personas en sus actos. ¡Así eran los que nos estaban representando ante la empresa!
Ya en plan culebrón, pillaron en la azotea a dos empleados echando un polvo, sí, sí, echándo un polvo.
Uno casado y con hijos y la otra viviendo con su novio. Los mandaron dos meses a casa sin empleo y sueldo y cuando volvieron les boicotearon dejándolos sin ordenador y arrimándolos. Creo que se han ido de baja por depresión y que han denunciado.
A una compañera de otra empresa, cuando volvió de su baja de maternidad, se encontró conque sus propios compañeros se negaban a devolverle su trabajo, como si creyeran que el que más trabaja tiene el puesto garantizado.
Tonterías, van a echar gente y, al menos yo, tengo claro que no van a ser los más gandules o los últimos que llegaron. Van a mandar los números y si la empresa consigue al fin ese préstamo que necesita para salir adelante, van a echar a los que el dinero les permita echar, lo tengo claro.
El caso es que el famoso préstamo no termina de llegar y aunque hay rumores todas las semanas, la empresa sigue sin decir nada, sin informarnos. El próximo mes se cumple un año desde que dejaron de pagarnos la paga extra  y si no denuncias ya, la puedes dar por perdida porque por ley, ese es el plazo para reclamar cantidades. La empresa podría evitar las denuncias dándonos un documento que acredite el reconocimiento de deuda, pero se niegan.
Así las cosas, unos han denunciado ya y otros aún se fian de los rumores: "estoy esperándo, dicen que la semana que viene firman", como si eso garantizara algo. Si al final firman, tengo claro que no seremos los primeros en cobrar, proveedores, seguridad social y otros también están en la cola.
Conclusión: un asquito trabajar en esta condiciones y a este paso, la empresa simplemente quiebra por la lentitud de reacción de los que mandan. ¡Qué estamos en 2012, señores, y la crisis empezó en 2008! Por Dios, que reaccionen.